
30 May ASISTENCIA DOMICILIARIA O RESIDENCIA: ¿CUÁL ES LA MEJOR OPCIÓN?
Tan solo hace unas pocas décadas, la pregunta de qué opción sería mejor: la asistencia domiciliaria o la residencia de mayores era impensable… Nuestros mayores eran atendidos normalmente por los hijos y se trasladaban al domicilio de estos, que se convertían en sus cuidadores y enfermeros a tiempo completo.
El ritmo de vida que llevamos hoy, donde todos los miembros de la familia trabajan o estudian, con horarios más exigentes y muchas veces localizados en municipios lejanos nos obligan a tomar la decisión de buscar una residencia de personas mayores o a decantarnos por la ayuda domiciliaria, donde la persona mayor es atendida en su propio domicilio por profesionales expertos que se ocupan de todos los cuidados que son requeridos.
En Asistencia Domiciliaria Numancia 7 creemos firmemente que la atención en el hogar presenta una serie de ventajas que facilitan los cuidados y aumentan la calidad de vida de la persona anciana, ya sea dependiente o válida para desempeñar las tareas habituales del día a día y es, también, la opción más recomendada por los expertos en geriatría.
En cualquier caso es siempre una decisión dura y difícil que puede incluso provocar desencuentros entre miembros de la unidad familiar.
Para Numancia 7 la principal ventaja es que la persona anciana permanece en su domicilio y no rompe con sus rutinas, manteniendo en contacto con sus seres queridos y su entorno social más inmediato. Los cambios bruscos, la pérdida de intimidad en las residencias de mayores y el no ver gente conocida puede provocar un deterioro cognitivo precoz y un estado de desorientación que agrava dolencias previas.
Los cuidadores de Numancia 7 son profesionales dedicados exclusivamente al cuidado de la persona mayor, que recibe una atención totalmente personalizada en función de sus características, y esto repercute siempre en una mayor calidad asistencial. Ayudamos al anciano en sus rutinas diarias (preparación de la comida, el aseo personal, la limpieza de la vivienda o la toma de medicamentos), además los cuidadores les hacen compañía, los sacan a pasear, les escuchan e intentan motivarlos intelectualmente para estimular sus capacidades cognitivas: los estímulos cognitivos y sociales son claves para la salud emocional en esta etapa de la vida.
La persona mayor se siente con cierta independencia y libre, ya que está en su propio hogar y los servicios a domicilio se adaptan totalmente a sus horarios, tipo de asistencia, el cuidador más idóneo para su cuidado…
Puede que haya situaciones en las que el estado del anciano aconseje el ingreso en una residencia, pero en cualquier caso en Numancia 7 aconsejamos que sea una decisión conjunta entre los familiares y la persona que necesita los cuidados asistenciales para que sea ella la que elija cómo y dónde desea envejecer: en hogar o en una residencia.