LOS DESAFÍOS DE LA CUARTA EDAD

18.020 personas centenarias viven en España, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Una cifra que va claramente en aumento porque, nuestro país, ha pasado de tener en poco más de 20 años 3.474 personas con más de 100 años (en 1998) a más de 18.000.

España tiene la cuarta tasa de esperanza de vida del mundo (83,6 años), según los últimos datos de la Organización Mundial de la Salud. ¿Las causas de esta longevidad de la población en nuestro país? Todavía no hay una respuesta comúnmente aceptada pero el envejecimiento de la población es, en cualquier caso, un logro de toda la sociedad, gracias a este aumento de la esperanza de vida, que ha sido posible por la mejora de las condiciones de vida de toda la población, por los avances del conocimiento en todas las áreas de salud y por la mejora de los recursos sociales, sanitarios y de protección social.

La expresión “cuarta edad” hace referencia a la última fase de la vida de las personas que alcanzan una vejez avanzada. Habitualmente se considera su comienzo a partir de los 80 años de edad. La gran mayoría de estas personas sufre enfermedades crónicas altamente discapacitantes, como Alzheimer, demencia senil, artrosis…, lo cual en muchos casos las hace dependientes tanto de su familia y entorno afectivo como de la atención sociosanitaria. Así, en España, casi la mitad de las personas mayores de 80 años padece algún grado de discapacidad.

Con estos datos en la mano, es comprensible que, cada vez más, las personas mayores planifiquen los últimos años de su vida de una forma activa. Reformar la vivienda habitual o, incluso, cambiarse de hogar por una adaptado a las nuevas condiciones de vida; nuevos hábitos sociales y de ocio, recuperar viejas aficiones, viajes, actividades deportivas…

Sin embargo, cuando ha llegado el umbral de la cuarta edad y resulta complicado realizar las tareas diarias sin ayuda externa, las empresas de asistencia domiciliaria ofrecen una servicio de atención que permite seguir disfrutando de todas las ventajas de seguir en la propia vivienda sin necesidad de traslados a centros que, como las residencias de mayores, desvinculan a la persona de su entorno habitual, afectivo y social, produciendo en ocasiones problemas de adaptación o incluso depresivos.

En Asistencia Domiciliaria Numancia 7 contamos con profesionales en el cuidado de las personas mayores, de acompañamiento 24 horas, los 365 días del año, y ayudamos a mantener y mejorar la calidad de vida. Llámenos y cuéntenos su caso o el de su familiar y podremos ofrecerle un presupuesto completamente personalizado. Estamos para resolver todas sus dudas. Confíe en nuestros servicios. Somos una empresa de reconocido prestigio y solvencia en Santander y Cantabria.